Un informe de seguridad presentado en la reunión de la junta del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde el lunes por la noche describió cómo un auditor bajo órdenes del estado ingresó a una de las escuelas del distrito este semestre a través de una puerta abierta para hacer una entrega con su camión.
También esta semana, un análisis por ProPublica, elTexas Tribune y el Washington Post determinó que una respuesta médica interrumpida y caótica al tiroteo en la Escuela Primaria Robb retrasó aún más la atención a las víctimas en mayo.
El miércoles, los líderes del Consejo Asesor Regional del Suroeste de Texas, la organización encargada de coordinar la atención médica de emergencia regional en el suroeste de Texas, defendieron la respuesta médica.
Un adolescente armado mató a 21 personas ese día, incluidos 19 niños pequeños.
El superintendente interino Gary Patterson, discutiendo el informe de seguridad de la escuela, explicó que "se obtuvo acceso en una puerta exterior en un campus que estaba en un área de carga de la cafetería".
El auditor intentó acceder aleatoriamente a tres de las escuelas del distrito durante un período de dos días. El intento tuvo éxito en una de las escuelas. Patterson dijo que todas las puertas estaban cerradas, pero que el pestillo de la puerta para realizar entregas en la cafetería estaba defectuoso. El muelle de carga no está en un área cercada.
El auditor fue detenido por el personal de la cafetería, que no tenía estudiantes en ese momento. Patterson dijo que el personal recibirá capacitación adicional en seguridad antes de que la escuela reinicie clases en enero.
El reporte de seguridad escolar también incluyó una actualización sobre las mejoras para la seguridad del campus.
Patterson señaló que los problemas materiales han causado retrasos en la instalación de barreras de seguridad y el reemplazo de puertas. “La preparatoria y la secundaria tienen un cero por ciento de finalización porque todavía estamos esperando esas puertas”, ejemplificó.
Las mejoras de seguridad, incluidos el reemplazo de puertas, cercas y cámaras de seguridad, se pagan en parte a través de $4.9 millones de dólares en subvenciones. El distrito también comentó que espera continuar con las entrevistas para llenar los puestos de policía del campus después de las vacaciones.
Demoras mortales
El análisis noticioso de imágenes de video y otros registros del día del tiroteo concluyó que dos de las tres víctimas que murieron después de ser rescatadas sufrieron demoras críticas en el acceso a la atención médica.
Se tardó 16 minutos en localizar una ambulancia para la profesora Eva Mireles, aunque había dos estacionadas a la vuelta de la esquina. Ella murió sin salir nunca de la escuela.
Los médicos pidieron un helicóptero para llevar a Xavier Lopez, de 10 años, a un hospital, pero optaron por trasladarlo ellos mismos en auto cuando no había un helicóptero disponible de inmediato.
Las familias de las víctimas respondieron en redes sociales con pesar y continuaron pidiendo que se finquen responsabilidades.
Los vehículos policiales y los autobuses escolares bloquearon el acceso de las ambulancias a la escuela. Y se les indicó a los helicópteros médicos que esperaran en un aeropuerto a tres millas de distancia.
Los expertos agregaron a los medios de comunicación que la mayor barrera para el acceso oportuno al tratamiento médico era la larga demora en confrontar al pistolero. Pero aclararon que una respuesta médica interrumpida también empeoró sus posibilidades de supervivencia.
El Senador estatal Roland Gutierrez, quien representa a Uvalde, recalcó en un comunicado que el Departamento de Seguridad Pública de Texas debería asumir la responsabilidad.
“En unas semanas, la Legislatura del Estado de Texas se reunirá por primera vez desde la masacre en Robb Elementary”, afirmó el Demócrata. “Rezo para que mis colegas se unan a nosotros para responsabilizar al DPS, tomar medidas de sentido común para detener la violencia armada. y hacer lo correcto por las familias en Uvalde”.
El miércoles, los líderes del Consejo Asesor Regional del Suroeste de Texas, la organización encargada de coordinar la atención médica de emergencia regional en el suroeste de Texas, defendieron la respuesta médica al tiroteo en Robb Elementary en una carta abierta a los proveedores médicos que coordinan.
La carta abierta obtenida por KSAT decía que el análisis de noticias tenía una "inclinación negativa".
“Dados los desafíos en el lugar de los hechos, las decisiones y la atención brindada por los miembros de nuestro equipo médico en Uvalde todo fue admirable”, enfatizó el director ejecutivo de STRAC, Eric Epley.
Epley agregó que Uvalde EMS tuvo unidades médicas en el lugar de los hechos en menos de tres minutos, y algunos pacientes inicialmente transportados en ambulancia se reunieron con equipos aéreos en lugares designados para el transporte a los hospitales.
Esta nota fue traducida por Texas Public Radio con apoyo de Gabriela Olivares e Yvette Benavides para NPR y The Texas Newsroom.
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