Varios cientos de activistas marcharon en el centro de San Antonio el sábado para llamar la atención sobre la violencia armada y abogar por cambios en las leyes sobre armas.
El evento March for Our Lives comenzó a las 10 a.m. en Milam Park. Luego, los participantes se dirigieron al Ayuntamiento, donde corearon sus demandas.
"Sutherland Springs y Uvalde, sitios donde ocurrieron dos de los tiroteos masivos más mortíferos en la historia de nuestro estado, están a 45 minutos de San Antonio", explicó la página de Facebook del evento. "No esperes a que una tragedia como esta llegue a tu área de la ciudad para actuar".
El veterano y maestro John Cedio fue uno de los oradores.
Simplemente creo que depende de nuestros líderes”, dijo. “Ellos son los que hacen las leyes. Nuestro congreso hace las leyes. Nuestros líderes tienen que hacer lo correcto. A veces, hacer lo correcto es difícil, pero ellos son los que tienen que levantarse y hacer lo correcto y hacer estos cambios para que todos los ciudadanos estén seguros".
March for Our Lives fue fundada por adolescentes a raíz del tiroteo masivo en una escuela en Parkland, Florida, donde 17 personas murieron en 2018.
“Creo que un lado cree que este movimiento está ahí para quitar las armas”, señaló Cedio mientras explicaba los objetivos del grupo. "Realmente, es para cambiar la facilidad con la que las personas las obtienen. Y se trata de los tipos de armas que están disponibles para que los ciudadanos las usen para infligir muertes masivas".
El tiroteo de Uvalde motivó a muchos en la multitud a participar en el evento. Dylan Villalon, coordinador del grupo Move Texas en el condado de Bexar, explicó cómo lo afectó el tiroteo de Uvalde.
"Definitivamente es diferente verlo tan cerca de casa", señaló. "Realmente me recordó lo fácil que es volverse complaciente con las cosas que suceden en todo el país, pero cuando suceden a 40 minutos de distancia, lo sientes. Lo sientes de una manera que no sientes otros incidentes. Es alentador ver a tanta gente decir que esto no está bien”.
La marcha en San Antonio coincidió con protestas similares en todo el estado y la Nación, incluido Washington D.C., Houston, Denver y Búfalo.
La marcha y el mitin se produjeron al final de una semana llena de acontecimientos relacionados con el tiroteo masivo en la Escuela Primaria Robb, que dejó 21 niños y adultos muertos y 17 heridos.
Lunes
La semana comenzó con una actualización sobre seis sobrevivientes de tiroteos hospitalizados en San Antonio.
University Health informó que una mujer de 66 años se encontraba en buen estado y un niño de 10 años estaba grave. Una niña de 9 años fue dada de alta del hospital durante el fin de semana. Un cuarto paciente del tiroteo fue dado de alta el 27 de mayo.
Un niño de 10 años tratado por heridas de bala en el Methodist Children's Hospital también fue dado de alta la semana pasada. A principios de este mes, el Brooke Army Medical Center informó que dos pacientes adultos estaban en buenas condiciones.
Martes
El martes por la mañana, el Ayuntamiento de Uvalde se reunió para prorrogar la declaratoria de emergencia emitida por el alcalde Don McLaughlin Jr.
La ausencia notable de la reunión fue Pete Arredondo, el jefe de policía del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde, quien ha sido criticado por su lenta respuesta al tiroteo. Rindió juramento como concejal de la ciudad en una reunión a puerta cerrada la semana pasada después de ganar una elección a principios de este año.
El alcalde de Uvalde, Don McLaughlin Jr., responde preguntas de la prensa el 7 de junio de 2022.
McLaughlin expuso a los periodistas en la reunión que no había hablado con Arredondo en una semana. Agregó que aún no había sido informado sobre la investigación en curso respecto al incidente, que ahora está dirigida por la fiscal de distrito del condado de Uvalde, Christina Busbee. Sin embargo, también admitió que no le había pedido al jefe de policía de su propia ciudad que le informara sobre la investigación.
También el martes, los comisionados del condado de Bexar aprobaron un paquete de medidas para combatir la violencia armada local, que incluye 21 millones de dólares para servicios de salud mental en las escuelas. El comisionado Justin Rodríguez destacó que los servicios de salud mental en las escuelas podrían ayudar a tiempo a un joven con problemas y prevenir futuros tiroteos en las escuelas.
Los comisionados también aprobaron casi 15 millones de dólares para expandir otros servicios de salud mental, incluidas más camas de tratamiento y una línea telefónica sobre cómo obtener ayuda para un familiar que muestra signos de una enfermedad mental. También aprobaron fondos para un programa de divulgación de seguridad de armas y para la distribución gratuita de candados para las armas.
Más tarde durante el día, Matthew McConaughey, el actor y nativo de Uvalde, participó en una conferencia de prensa en la Casa Blanca y exigió a los Republicanos y Demócratas que aprobaran la reforma de las armas. "La gente en el poder no ha actuado", acusó, hablando en nombre de las familias de las víctimas.
NPR informó que pidió "leyes de alerta, que permiten a una persona solicitar a un tribunal que retire temporalmente las armas de alguien que se ha considerado una amenaza para sí mismo o para otros", junto con más verificaciones de antecedentes y aumentar la edad mínima para comprar rifles semiautomáticos, como los que se han usado en los tiroteos.
Miércoles
El miércoles, el Comité de Supervisión y Reforma de la Cámara de Representantes de EE. UU. escuchó el testimonio de Miah Cerrillo, de 11 años de edad, quien sobrevivió al tiroteo. En un video reproducido durante la audiencia, la alumna de cuarto grado contó cómo el tirador disparó a sus compañeros de clase. Ella pensó que el agresor también le dispararía, así que se untó la sangre del cuerpo de su amiga por todo el cuerpo y fingió su muerte. Luego llamó al 911. NPR informó que "creía que volvería a ocurrir otro tiroteo".
Los padres de las víctimas de disparos también testificaron y exigieron reformas a las leyes de armas. Los familiares de otras víctimas de la violencia armada también testificaron ante el comité, que planea redactar una nueva legislación de reforma de armas. En cambio, los Republicanos pidieron escuelas más seguras y mejores programas de salud mental.
Además, el miércoles NPR informó que el Departamento de Justicia de EE. UU. abrió "una revisión de incidentes" del tiroteo para explorar las acciones y reacciones de los organismos encargados de hacer cumplir la ley, que han sido muy criticadas, en particular por los padres de las víctimas. Los funcionarios enfatizaron que no se trata de una investigación criminal y que no impondrán ningún castigo.
Explicaron que el objetivo es aprender de cualquier error, desarrollar mejores prácticas para el personal de emergencia y mejorar la comunicación con el público durante crisis similares.
Jueves
El jueves por la mañana, el superintendente del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde, Hal Harrell, comentó que los estudiantes originalmente asignados a Robb Elementary ahora irán a otras dos escuelas. Los estudiantes que ingresen al segundo grado permanecerán en la Escuela Primaria Dalton, y los de grados 3 a 6 se trasladarán a Flores.
Harrell añadió que se han asignado agentes a cada campus durante la escuela de verano y que el distrito está elaborando un plan para hacer que los campus sean más seguros.
Los funcionarios escolares se negaron a responder a la mayoría de las preguntas de los reporteros, incluso si las puertas de la escuela se cerrarán automáticamente o cuándo los padres podrían obtener respuestas claras sobre lo que sucedió el día del tiroteo.
Ese mismo día, el Representante Dustin Burrows, R-Lubbock, abrió una investigación del comité de la Cámara de Representantes de Texas sobre la respuesta de la policía al tiroteo de Uvalde. “Todo el estado de Texas merece conocer los hechos y las respuestas sobre lo que sucedió antes, durante y después de esta tragedia”, afirmó, aclarando que los testigos declararán en sesiones cerradas.
El comité de tres personas puede producir un reporte preliminar en las próximas semanas para compartir información con el público antes de completar su trabajo. El Representante Joe Moody, Demócrata por El Paso, y Eva Guzman, ex miembro Republicana de la Corte Suprema de Texas, también están en el comité.
El jueves por la tarde, The New York Times informó que, en base a una revisión de videos escolares, imágenes de cámaras corporales y documentos policiales, los oficiales desplegados en el incidente retrasaron el enfrentamiento con el tirador más de una hora "a pesar de que a los supervisores en el lugar de los hechos se les dijo que algunos atrapados con él en dos aulas de la escuela primaria necesitaban tratamiento médico...". En cambio, informó el Times, "esperaron que llegara equipo de protección para reducir el riesgo de los oficiales".
El jueves por la noche, la cobertura del tiroteo de Uvalde pasó brevemente a un segundo plano cuando las audiencias que investigan la insurrección del 6 de enero de 2021 en el Capitolio de EE. UU. comenzaron en Washington D.C. Varios medios de comunicación, incluido TPR, transmitieron las audiencias en vivo.
Los televidentes vieron imágenes fascinantes, muchas de ellas nunca antes vistas, de hordas de alborotadores que asaltaron violentamente los terrenos del Capitolio, golpearon a los policías y corrieron por los pasillos con pancartas de la campaña de Trump y banderas confederadas.
El jefe de policía del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde, Pete Arredondo, en un camino de terracería a las afueras de la ciudad el miércoles. Uno de los primeros en responder al tiroteo masivo en la Escuela Primaria Robb el 24 de mayo, recordó: "Lo único que era importante para mí en este momento era salvar a la mayor cantidad posible de maestros y niños".
Pero cuando concluyeron las audiencias, The Texas Tribune publicó su entrevista exclusiva con Arredondo, el jefe de policía de UCISD. El directivo le dijo al Tribune que pensó que él mismo podría dispararle al hombre armado o abrir fuego cuando él y otros oficiales se pararon frente a la puerta de un salón de clases cerrado con llave en la Escuela Primaria Robb.
Arredondo agregó que pensaba que alguien más estaba a cargo de la respuesta. No se consideraba el comandante al frente del incidente en el lugar de los hechos.
Dejó en claro que nunca transmitió instrucciones para retrasar el ingreso al edificio. No emitió ninguna orden y no estaba al tanto de las llamadas al 911 de estudiantes o maestros porque dejó atrás sus radios de la policía y otros oficiales no le transmitieron la información.
Viernes
La semana terminó con otro funeral.
El viernes por la mañana, Eva Mireles, la maestra de 44 años que murió en el tiroteo, fue sepultada en el cementerio de Hillcrest en Uvalde después de una misa en la iglesia católica Sacred Heart. Había sido maestra durante 17 años.
A Mireles le sobreviven su hija y su esposo, quien es oficial de la policía de Uvalde CISD. Según reportes, estaba hablando por teléfono con su esposo poco antes de su muerte.
NPR, Lucio Vásquez de Houston Public Media y Sergio Martínez-Beltrán del Texas Newsroom contribuyeron con esta información.
Esta nota fue traducida por Texas Public Radio con apoyo de Gabriela Olivares, Roberto Sierra, Francisco Marín, Pamela Martinez, Ana Baehr, e Yvette Benavides, para NPR y The Texas Newsroom. Haga clic aquí para más cobertura de Uvalde en español.