Un campamento de personas migrantes en Matamoros, al otro lado de la frontera desde Brownsville, ha sido desmantelado por autoridades mexicanas.
Grupos de ayuda dicen que a los habitantes del campamento se les dio poco o ningún aviso antes de que sus pertenencias fueran retiradas con maquinaria pesada.
Sidewalk School, un grupo de ayuda para personas migrantes en Matamoros, dijo que la destrucción del campamento se llevó a cabo justo un día después de Navidad.
La Prensa Asociada reporta que oficiales de inmigración mexicanos ordenaron la evacuación del campamento, aun habiendo cientos de solicitantes de asilo esperando sus citas.
Muchas tiendas de campaña ya estaban vacías, pero varias personas dijeron que la mayoría fueron obligadas a abandonar el campamento.
Casi cien personas migrantes ingresaron al Río Grande y se quedaron varados durante más de 12 horas.
Funcionarios estadounidenses se reunieron con el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ayer miércoles para abordar la cantidad de migrantes que cruzan ilegalmente a EE. UU.
López Obrador dijo que se lograron "acuerdos importantes" entre los países, pero no dio detalles.
La protección legal internacional brindada por la Convención sobre Refugiados de la ONU, en la cual ambos países acordaron que los solicitantes de asilo pueden cruzar cualquier frontera, sigue sin desempeñar un papel en las políticas a corto plazo para el manejo de migrantes en ambos lados de la frontera.