El Departamento de Justicia de los EE.UU., o DOJ, presentó una demanda contra SpaceX en agosto por supuestamente negarse a contratar refugiados o solicitantes de asilo, grupos protegidos por la ley federal contra ese tipo de discriminación laboral.
Aunque a las personas que se les ha dado el estatus de asilo o de refugiado tienen derecho a trabajar en el país, ahora un juez federal en Brownsville está apoyando a SpaceX en la demanda.
El juez estadounidense Rolando Olvera ha bloqueado el caso del DOJ, pendiente el resultado de una contrademanda de SpaceX que alega que el caso viola la Constitución de los EE. UU.
En una orden emitida la semana pasada, el juez Olvera se puso del lado de SpaceX en ese argumento, agregando también que los jueces administrativos del Departamento de Justicia que escuchan casos relacionados con prejuicios antiinmigrantes no fueron debidamente nombrados.
SpaceX también ha negado las acusaciones de discriminación en sus contrataciones apesar de que el CEO de SpaceX, Elon Musk, afirmó anteriormente múltiples veces que la compañía sólo puede contratar ciudadanos estadounidenses.
Olvera tiene su sede en Brownsville, la ciudad más cercana a la instalación de lanzamiento de SpaceX en el sur de Texas.
EL DOJ mantiene que las afirmaciones de Musk son equivocadas y que han sido desmentidas por el DOJ como parte de su demanda.