México ha estado tomando medidas para frenar la migración en su frontera norte en respuesta a la presión de parte de Estados Unidos.
Funcionarios de Estados Unidos y México se han reunido dos veces desde diciembre, cuando la migración alcanzó más de 225,000 encuentros en la frontera.
Esa cifra ha disminuido desde entonces, ya que México está combatiendo las redes de contrabando y aumentando las patrullas a lo largo de las rutas de transporte pesado.
También hay informes de que las autoridades mexicanas han desalojado algunos campamentos de migrantes a lo largo de la frontera.
Yael Schacher, Directora para las Américas y Europa en Refugees International, afirma que Estados Unidos también está presionando a México para que refuerce la vigilancia en su frontera sur con Guatemala y aumente las deportaciones.
"Espero que las negociaciones con Guatemala realmente resulten en más vías legales para los guatemaltecos y no impliquen pedirle a Guatemala que intensifique sus propios esfuerzos de control," dijo Schacher.
Según el Gobierno mexicano, ambos países acordaron realizar una visita conjunta al Tapón del Darién y a Guatemala para comprender mejor la migración en las Américas y fortalecer la cooperación regional.