El concejo municipal de San Antonio aprobó en septiembre un presupuesto de 500 mil dólares para financiar el nuevo Fondo de Justicia Reproductiva de la ciudad.
Pero la Asociación Familiar de San Antonio ha presentado una demanda para bloquearlo.
Han pasado varias semanas desde que se aprobó el fondo, pero aún no se sabe si se utilizará para cubrir los gastos de pacientes de Texas que decidan buscar acceso al aborto en otros estados.
Patrick Von Dohlen, el cofundador de la Asociación Familiar de San Antonio, dice que lo que se pretende hacer con el fondo es ilegal porque violaría la ley antiaborto de Texas “ya que están ayudando y favoreciendo a organizaciones criminales”.
Von Dohlen dice que la asociación tomará acciones legales para evitar que el dinero de la ciudad se utilice para el Fondo de Justicia Reproductiva.
Von Dohlen se refiere a organizaciones como The Buckle Bunnies, que apoya a aquellos que necesitan ayuda financiera para tener acceso a procedimientos de aborto en otros estados.
Makayla Montoya Frazier, la directora del Fondo Buckle Bunnies, afirmó que las organizaciones que ofrecen servicios de aborto fuera del estado son completamente legales.
Frazier dice que Buckle Bunnies recibe unas 60 llamadas a la semana de texanos que necesitan acceso a procedimientos de aborto.
En promedio, ellos proporcionan al paciente alrededor de dos mil dólares en asistencia para viajes, alojamiento y servicios médicos.
Pero su cuenta bancaria se está agotando.
Ella dice que el Fondo de Justicia Reproductiva de San Antonio podría llegar justo a tiempo, dependiendo de lo que suceda en la corte.