El pistolero que mató a 23 personas en un Walmart de El Paso fue sentenciado a 90 cadenas perpetuas consecutivas en una prisión federal el viernes.
El castigo se produce casi cuatro años después de que Patrick Crusius, de 24 años, condujera 10 horas desde Allen hasta El Paso, Texas para matar a tiros a hispanos en un intento de evitar lo que llamó una "invasión hispana de Texas" en una publicación en línea.
El juez de distrito federal David Guaderrama dictó el castigo después de dos días de declaraciones sobre el impacto de las víctimas en los familiares que arremetieron contra el pistolero, llamándolo un racista sin agallas que cambió la vida de decenas de habitantes de El Paso únicamente por vivir en una ciudad predominantemente hispana.
Crusio fue declarado culpable el 8 de febrero de 90 cargos federales por delitos de odio y armas de fuego. Parte del acuerdo entre sus abogados y fiscales incluía aceptar las 90 cadenas perpetuas, una por cada cargo en la acusación, según el Departamento de Justicia. Guaderrama dijo que recomendaría a Crusius cumplir su condena en la cárcel de superseguridad máxima, o Supermax, el conocido centro de detención en Colorado.
Cuando sacaban a Crusius de la sala, uno de los familiares de las víctimas le gritó al pistolero: “¡Te volveremos a ver, cobarde!”.
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Esta nota fue traducida por Texas Public Radio con apoyo de Gabriela Olivares e Yvette Benavides para NPR y The Texas Newsroom.
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