El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo una solicitud especial al Senado mexicano el martes para permitir que el ejército estadounidense brinde entrenamiento de seguridad a elementos de SEDENA, el Ministerio de Defensa Nacional del país.
El entrenamiento militar estadounidense en suelo mexicano por lo general abarca más de dos décadas, según el Mexico Violence Resource Project, un proyecto que provee información sobre la violencia y el crimen organizado en México.
Pero más recientemente, Estados Unidos ha enviado soldados de infantería para participar en ejercicios conjuntos en los últimos dos años como parte de un programa de respuesta a desastres.
La solicitud de López Obrador de esta semana incluye casi dos meses de entrenamiento del Grupo de Fuerzas Especiales 7 del Ejército de los Estados Unidos, especializado en guerra no convencional en países de América Latina.
La solicitud de López Obrador se produjo días después de una reunión con el presidente Biden en California, y después de un intercambio público de varios meses en el que el presidente mexicano desestimó los repetidos llamados de los republicanos en el Congreso de EE. UU. para una presencia militar estadounidense en México.
La violencia de grupos del crimen organizado se ha intensificado durante la administración de López Obrador, incluido el secuestro de cuatro estadounidenses en marzo que resultó en dos muertes.
