El número de casos de inmigración pendientes en los EE.UU. ha llegado a 2 millones, más del doble de casos de antes del inicio de la pandemia.
Así lo indica un nuevo informe del Migration Policy Institute, o MPI.
Muzaffar Chishti es el autor principal del nuevo informe del MPI.
Él dice que el actual sistema de tribunales de inmigración, que hace que los migrantes esperen hasta siete años para una decisión final, contradice completamente el objetivo del programa de asilo. Expone que “la acumulación de solicitudes pendientes se convierte en el factor de atracción. Las personas que realmente merecen asilo no lo obtienen durante mucho tiempo. Y las personas que no lo merecen, para cuando obtienen su orden final, han estado en este país durante tanto tiempo con vínculos establecidos que hacen imposible su deportación.”
Chishti dice que el alto volumen de solicitudes no es el factor principal que causa los grandes números de casos acumulados.
Sino que litigar el asilo en los EE.UU. se ha vuelto cada vez más complejo en los últimos años debido a una serie de cambios en las políticas.
A pesar de que ahora hay más jueces de inmigración para abordar la acumulación de casos pendientes, el número de casos que cada juez puede resolver continúa disminuyendo.
Según el informe, los casos resueltos anualmente por juez han pasado de 1,000 en 2009 a unos 200 actualmente.
