El Departamento de Justicia de EE.UU., o DOJ, dice que la ley de inmigración más reciente de Texas, El Proyecto de Ley del Senado 4, que convierte la inmigración ilegal en un delito estatal, es inconstitucional.
En una carta obtenida por la publicación Houston Chronicle, el DOJ le dijo al gobernador Greg Abbott que el estado no puede hacer cumplir la legislación.
El DOJ dice que buscará evitar que Abbott haga cumplir la nueva ley por todas las vías legales posibles.
El estado tiene hasta el 3 de enero para cumplir.
La ley en cuestión permite que cualquier oficial en Texas arreste a personas migrantes acusadas de ingresar ilegalmente al estado desde México.
La legislación también da a los jueces el poder de ordenar la expulsión de una persona migrante del estado.
La ley fue fuertemente criticada por grupos defensores de los migrantes, jueces de inmigración y funcionarios electos en todo el estado y en Washington.
La Corte Suprema de Estados Unidos dictaminó en 2012 que solo el gobierno federal podía hacer cumplir la ley de inmigración después de que Arizona intentó promulgar una legislación similar.