De acuerdo a la organización Walk Free, la esclavitud moderna es un término general que abarca varios tipos de explotación, que incluyen el trabajo forzado, el tráfico de personas, y el matrimonio forzado.
Katherine Bryant, jefa de Política y Programas para Walk Free, explicó en una entrevista con El Economista que en México hay personas que son sometidas a trabajo forzoso en las áreas de minería, manufactura, empleo doméstico, y cuidado de niños.
Estas personas comúnmente trabajan bajo condiciones inhumanas y no se les da acceso al seguro social, a cuidado médico o a asesoría legal.
Por lo general tampoco reciben ningún sueldo ni tienen derecho a descanso.
En México, siete de cada 1,000 personas viven en condiciones de esclavitud moderna.
Uno de los grupos más vulnerables ante esta situación en México es el de los migrantes.
Entre 2016 y 2020, más de 4 millones de migrantes se vieron forzados a quedarse en México en su trayecto hacia Estados Unidos a causa de políticas migratorias que restringen el acceso al país, haciéndolos especialmente susceptibles a la explotación, según Katherine Bryant.