Oficiales federales dicen que el riesgo de influenza aviar para el público sigue siendo bajo después de que la Administración de Alimentos y Medicamentos anunciara el miércoles que las pruebas de leche comercialmente disponible detectaron rastros del virus en vacas lecheras.
La enfermedad, que es muy contagiosa y a menudo fatal en poblaciones de aves, se ha propagado a rebaños de vacas en al menos ocho estados.
Pero oficiales del gobierno y expertos científicos dicen que hasta ahora no hay evidencia de que haya un virus infeccioso en la leche pasteurizada.
Las pruebas realizadas en la leche que se vende al público mostraron que había material genético del virus pero que no se encontraba "vivo" o infeccioso.
La pasteurización se ha utilizado en Estados Unidos durante décadas para matar bacterias y virus dañinos en la leche, pero la pasteurización puede no eliminar todos los rastros de un virus.
Eso es probablemente lo que está sucediendo con la gripe aviar en la leche: Las pruebas muestran que el virus solía estar allí, pero ya no puede causar una infección.