El estado de Texas regresará a un tribunal federal el jueves para intentar revocar las protecciones legales y beneficios del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, conocido como DACA, potencialmente afectando a miles de inmigrantes indocumentados.
El estado alega que el programa que otorga permisos de trabajo renovables y retrasa las deportaciones de personas que llegaron a EE.UU. cuando eran niños, está causando daño económico a Texas ya que los beneficiarios utilizan recursos del estado como la educación pública y Medicaid.
Sin embargo, la defensa argumenta que Texas no ha proporcionado pruebas del costo exacto del programa y que no se está considerando la ganancia económica generada por los beneficiarios de DACA–inmigrantes que trabajan, pagan impuestos, y contribuyen a la economía del estado
Texas también alega que los beneficiarios del programa están reduciendo los trabajos disponibles para las personas nacidas en el país, mientras que la defensa sostuvo que no hay pruebas de que los empleadores prefieran contratar a beneficiarios de DACA antes que a ciudadanos.
Por otro lado, la defensa dijo que si el juez Andrew Hanen anula el programa, debería hacerlo de manera parcial y revocar solo el permiso de trabajo que se otorga a través del programa, permitiendo a aquellos que ya están en los EE.UU. evitar la deportación.
Además, sugirieron que el juez federal podría anular el programa específicamente en Texas, ya que es el estado que presentó la demanda.
Actualmente, hay más de 580,000 beneficiarios de DACA en todo el país.
El juez Hanen aún no ha tomado una decisión y no se sabe cuándo lo hará.
